SACRAMENTO, California — En un avance crucial para los trabajadores de California, el Proyecto de Ley del Senado 616, redactado por la senadora Lena González, ha impulsado un cambio notable que entrará en vigencia el 1 de enero de 2024. Esta legislación garantiza que los empleados del estado disfrutarán un aumento de permiso por enfermedad de cinco días remunerados al año, sobre el mandato existente de tres días. El proyecto de ley también amplía las protecciones contra represalias a los trabajadores afiliados a un sindicato.
Aunque la victoria legislativa es significativa, grupos de defensa de familias, mujeres y varios sindicatos la ven como un compromiso. Inicialmente luchando por siete días de permiso remunerado por enfermedad, los defensores enfrentaron duran negociaciones durante el proceso legislativo, lo que resultó en la disposición final de cinco días.
Por otro lado, asociaciones comerciales que representan a varias industrias, como la Asociación de Autoservicios de California y la Asociación de Hoteles y Alojamientos de California, junto con cámaras de comercio estatales, argumentan que la ley impone una carga injusta a las pequeñas empresas, especialmente a aquellas que aún lidian con las secuelas de la pandemia, la inflación y la carga financiera adicional de cubrir a los trabajadores enfermos.
La Cámara de Comercio del Estado, clasificando la ley de permisos por enfermedad como un “asesino de empleos”, ha emitido guías para que los empleadores naveguen sus complejidades. Sin embargo, el gobernador Gavin Newsom, al firmar el proyecto de ley el 4 de octubre, enfatizó la importancia de priorizar la salud y el bienestar de los trabajadores y sus familias. La nueva ley tiene como objetivo resolver el dilema que enfrentan muchos trabajadores, los cuales tenían que elegir entre perder un día de salario o atender su salud o la de sus familiares cuando estaban enfermos.
Esta expansión de los beneficios de permisos por enfermedad se logra tras varios esfuerzos anteriores, especialmente durante la pandemia, cuando una ley en marzo de 2021 requerió que los empleadores más grandes proporcionaran hasta 10 días adicionales para una cuarentena o los efectos secundarios de la vacuna. Sin embargo, esta disposición y los créditos fiscales federales asociados expiraron seis meses después.
