CALIFORNIA – La unidad de conducción autónoma de General Motors (GM), conocida como Cruise, ha sido sancionada por los reguladores de California con la multa máxima debido a su tardanza en reportar detalles críticos sobre un accidente que involucró a uno de sus robotaxis.
En octubre de 2023, un robotaxi de Cruise atropelló y arrastró a un peatón, lo que llevó a los reguladores de California a revocar el permiso de la firma para operar vehículos sin conductor. Posteriormente, el Departamento de Vehículos Motorizados de California (DMV) acusó a Cruise de “tergiversar” y “omitir” información esencial en los informes del accidente presentados a los reguladores.
La Comisión de Servicios Públicos de California (CPUC) ha ordenado oficialmente a Cruise pagar una multa de $112,500. Esta decisión se tomó después de una audiencia en la que el regulador incrementó la solicitud inicial de multa de $75,000 a $112,500.
“Agradecemos poder haber llegado a un acuerdo con la CPUC. En los últimos meses, hemos tomado medidas importantes para mejorar nuestro liderazgo, procesos y cultura”, declaró Cruise en un comunicado.
La sanción corresponde a $7,500 por cada uno de los 15 días de retraso en reportar los detalles críticos al regulador. Además, ahora Cruise deberá presentar informes regulares de “colisiones” tanto a la CPUC como a la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras (NHTSA).
Cruise ha reafirmado su compromiso con la seguridad y la transparencia, implementando mejoras significativas en sus procesos internos.
La multa impuesta a Cruise por los reguladores de California subraya la necesidad de una estricta adherencia a las normativas de seguridad y transparencia en la industria de la conducción autónoma. A medida que Cruise trabaja para recuperar la confianza del público y de los reguladores, su compromiso con la mejora continua y la responsabilidad será crucial para su éxito futuro en el mercado de vehículos autónomos.