CALIFORNIA – Una reciente demanda colectiva presentada en la Corte Superior del Condado de Stanislaus ha puesto en el centro de atención a Community Hospice, una reconocida organización de cuidados paliativos en Modesto.
La demanda colectiva, liderada por Tyeisha Travis, una ex empleada, busca recuperar salarios presuntamente no pagados durante un período de 19 meses para empleados actuales y anteriores.
La situación ha generado controversia debido a las serias acusaciones de violaciones laborales, incluyendo el incumplimiento en el pago de horas extras y la falta de descansos obligatorios.
Según la demanda, Community Hospice, una organización sin fines de lucro, no cumplió con las leyes laborales de California al no pagar las horas extras y otros salarios adeudados a sus empleados.
Además, se alega que la organización no proporcionó los descansos para comidas y periodos de descanso requeridos por la ley, y subpagó a los trabajadores por el tiempo de enfermedad.
Estas violaciones podrían haber afectado a un gran número de empleados, ya que se estima que las cantidades no pagadas podrían ascender a $5 millones.
El alcance exacto de la demanda no especifica cuántos trabajadores están buscando compensación, pero abarca un período de tiempo significativo, desde septiembre de 2019 hasta abril de 2022.
Entre las reclamaciones adicionales, se incluye que los empleados pagados por hora fueron subpagados por sus horas extras, ya que estas se calcularon sobre una tasa base en lugar de la tasa de salario de incentivo que los empleados habían ganado a través de un programa de bonificaciones basado en el desempeño.
Community Hospice, que recientemente fue reconocido como uno de los mejores lugares para trabajar en la región, respondió a las acusaciones a través de un comunicado oficial. La organización expresó su compromiso con la salud y seguridad de sus empleados, asegurando que están trabajando diligentemente para garantizar prácticas legales y éticas en el lugar de trabajo.
Asimismo, confirmaron que han contratado un equipo legal para abordar la demanda y que se mantendrán transparentes durante todo el proceso legal. Sin embargo, Community Hospice no proporcionará más detalles públicos sobre el caso, subrayando su compromiso con la privacidad de sus empleados actuales y anteriores.
Además de las violaciones laborales, la demanda también incluye acusaciones de discriminación racial. Tyeisha Travis, la demandante principal, afirma que fue objeto de comentarios discriminatorios sobre su peinado afroamericano y color de piel mientras trabajaba en el hospicio.
Según la demanda, las quejas que Travis presentó a la dirección de recursos humanos no fueron tomadas en serio, lo que finalmente la llevó a renunciar el 13 de abril de 2022.
Otra cuestión importante en la demanda es el reembolso a los empleados por gastos de negocios, lo cual también ha sido un punto de controversia en el caso. Estos reembolsos, junto con las otras alegaciones, serán discutidos en una conferencia de gestión del caso programada para agosto.
A pesar de la disputa legal, Community Hospice ha prometido que la situación no interferirá con su misión de proporcionar cuidados paliativos de calidad a los pacientes en el Valle Central. La organización, que es el mayor proveedor sin fines de lucro de estos servicios en la región, enfrenta ahora un desafío significativo para mantener su reputación y continuar con sus operaciones mientras se resuelve el caso legal.