Los Ángeles, California – La reconocida cantante Kelly Clarkson ha presentado una nueva demanda en Los Ángeles contra su ex esposo Brandon Blackstock y la empresa de gestión de su padre, Starstruck Entertainment, alegando violaciones laborales en California. Esta acción legal sigue a una victoria previa de Clarkson en un caso similar el mes pasado, y se espera que profundice aún más en las presuntas irregularidades cometidas.
En la demanda, Clarkson busca reivindicación por lo que considera un prolongado incumplimiento por parte de Blackstock y Starstruck Entertainment de las normativas laborales del estado. Específicamente, se hace referencia a la violación de la Ley de Agencias de Talento, alegando que la empresa operaba como una “agencia de talentos no autorizada” desde 2007, organizando actividades comerciales en su nombre.
La cantante solicita que se declare la nulidad de todos los acuerdos previos con la empresa demandada y que se le reembolse íntegramente todo el dinero pagado desde 2007. Esto incluye comisiones, tarifas, ganancias, anticipos, tarifas de producción y cualquier otro pago realizado a Starstruck Entertainment.
Blackstock, a través de su abogado Bryan Freedman, ha defendido su posición argumentando que es injusto intentar recuperar fondos que, según él, fueron utilizados para apoyar tanto a Clarkson como a sus hijos durante su matrimonio. Freedman insiste en que Blackstock no solo fungió como el manager de Clarkson, sino que también invirtió los ingresos en el bienestar de la familia.
Este último desarrollo legal en la disputa entre Kelly Clarkson y Brandon Blackstock podría ser visto como un contraataque estratégico por parte de la artista. Dado el historial de litigios entre ambas partes, es probable que este caso tenga implicaciones significativas para ambas partes.
El resultado final de este caso aún está por determinarse, pero es evidente que ambas partes están comprometidas a luchar por sus intereses en los tribunales.
